Eso fue lo que dijeron los profesores del héroe de guerra que descifró los menajes cifrados de los nazis durante la II Guerra Mundial.
Alan Turing nació el 23 de junio de 1912 en Londres, comienzó con sus estudios en la mencionada escuela de Sherborne, en Dorset, para luego continuar en el King’s College de Cambridge. De ahí, partió para unirse al grupo de élite encargado de analizar mensajes cifrados durante la Segunda Guerra Mundial.
Turing consiguió desarrollar The Bombe, una máquina capaz de descifrar el código secreto y cuya creación se cosidera clave en el nacimiento de la informática moderna.
El genio, considerado ahora como héroe de guerra, tuvo una vida muy dura y que terminó de forma trágica. Turing, que era homosexual, fue condenado públicamente por ello, lo que hizo que le sometieran a un proceso de castración hormonal, y en 1954, a los 41 años, se suicidó. Su cadáver apareció junto a una manzana mordida envenenada con cianuro.
En 2013, la Reina Isabel II concedió un perdón real a Turing y se aprobó en Reino Unido la llamada Ley Turing, que concedía perdones similares a miles de hombres gais y bisexuales que habían sido condenados por lo que entonces eran «ofensas sexuales».
OPINIÓN PERSONAL: ¿Qué es lo que más te ha sorprendido de su historia?
Lo que más me ha sorprendido ha sido la capacidad de crear una máquina capaz de descifrar un código secreto con tanta persión, la capacidad de concentrarse y conseguir que los británicos descubrieran algunos de los ajustes diarios de las máquinas Enigma en las varias redes militares alemanas.
Esta es la película que han hecho sobre él:
CLAUDIA TIC 1 17/ 18 